Cómo mantener una piel radiante y saludable incluso cuando estás a 30,000 pies de altura. Los viajes en avión pueden ser agotadores para nuestra piel, pero con una rutina facial adecuada, puedes desafiar la sequedad y la fatiga. ¡Descubre cómo cuidar tu piel en el cielo y aterrizar con un cutis fresco y vibrante!
Volar a grandes alturas presenta desafíos únicos para nuestra piel. La baja humedad en la cabina del avión puede provocar sequedad extrema, irritación y sensibilidad. Además, la exposición prolongada a la radiación ultravioleta a altitudes elevadas puede afectar la producción de colágeno y acelerar el envejecimiento cutáneo. ¿La solución? Una rutina facial en el avión diseñada para contrarrestar estos efectos.
. Limpieza Profunda: Antes de embarcar, asegúrate de tener una piel limpia. Esto preparará tu piel para la rutina que os voy a enseñar.
2. Hidratación Intensa: Durante el vuelo, la clave es la hidratación y la emoliencia. Opta por una mascarilla facial o un spray facial hidratante. Los productos enriquecidos con ácido hialurónico son ideales para retener la humedad y mantener tu piel fresca, eso sí, mejor si le añadimos ceramidas que nos ayudarán a retener esa hidratación.
3. Protección Solar: Aunque estés dentro del avión, la radiación UV puede atravesar las ventanas. Aplica un protector solar ligero para proteger tu piel de los dañinos rayos UV.
*4. Evita el Alcohol y la Cafeína: Estos pueden contribuir a la deshidratación, así que trata de limitar su consumo durante el vuelo. Opta por agua y bebidas hidratantes para mantener tu piel en su mejor estado.
Te dejo con el vídeo, espero que te guste y te resulte útil.